Antes de reportar con Chivas Ormeño vivió en la tribuna el último partido como jugador Esmeralda.
Estuvo bien acompañado por su novia y mostró su lado romántico, y por qué no en su día libre se olvidó de la estricta dieta de futbolista.
Además, durante el primer tiempo estuvo activo en redes sociales respondiendo algunos mensajes, y revisando lo más reciente en noticias.Al medio tiempo fue buscado por las cámaras de Azteca Deportes pero no concedió la entrevista.
Algunos aficionados no dejaron pasar la oportunidad para pedirle una foto, decirle algunas palabras y a la distancia también se tomaron la selfie una vez más lo buscaron y se levantó del asiento para la foto, regresó a su lugar y siguió regalando fotos sin desatender en ningún momento a su novia.
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Enseguida mantuvo una conversación con un semblante de felicidad, de esa misma manera estuvo posando en todas las selfies que le pedían. Nuevamente brincó la reja porque hasta un aficionado de Pumas quería foto con él, hubo fallas técnicas y ahora sí quedó sobre un pasillo dónde llegaron más aficionados.
Continuaron las selfies con Ormeño a manera de despedida y los aficionados aprovecharon cada segundo en la despedida del delantero que fue testigo de una remontada de tres goles.
