Una jueza federal en Florida solicitó el sábado al Departamento de Justicia que le entregue información más específica sobre los expedientes clasificados que fueron retirados de la finca del expresidente Donald Trump y dejó entrever su intención preliminar de nombrar a un colaborador especial en el caso.
La orden de dos páginas de la jueza federal de distrito Aileen Cannon muestra que se inclina por acceder a una petición a los abogados de Trump, quienes esta semana solicitaron que nombre a un colaborador especial que supervise la revisión de los expedientes sacados de la finca Mar -a-Lago en Florida para que esa persona identifique los que puedan estar protegidos con el privilegio ejecutivo y garantizado la devolución de los documentos que estén fuera del alcance de la orden judicial de cateo.
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La jueza programó para el jueves una audiencia a fin de ampliar el análisis del asunto y dijo que el Departamento de Justicia tendrá la oportunidad de plantear sus objeciones al respecto.
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En otros casos de gran interés mediático los jueces han nombrado a un colaborador especial (un exjuez).
Cannon también seguramente al Departamento de Justicia que le presente de manera precintada descripciones más detalladas de los materiales extraídos de la finca de Trump y “que digan específicamente propiedad incautada”.
Los abogados del expresidente se han quejado de que los investigadores no les facilitaron suficiente información sobre los documentos específicos retirados cuando los agentes hicieron efectiva la orden de cateo el 8 de agosto en busca de materiales clasificados.
Es improbable que el nombramiento del colaborador especial, si sucede, altere el rumbo de la investigación del Departamento de Justicia, aunque es posible que una revisión externa de los documentos lentifique la pesquisa.
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