Religión.- La Virgen de la Merced, venerada por millones de fieles en todo el mundo, es invocada especialmente como la protectora de los cautivos y los oprimidos. Su figura, cargada de simbolismo y esperanza, ha trascendido los siglos. A través de la oración, los devotos acuden a ella en busca de su intercesión divina, pidiendo por la justicia, la libertad y la protección ante las adversidades. Aquí te decimos una oración con la que puedes orar a la Virgen .
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¿Qué se le pide a la Virgen de la Merced?
La devoción a la Virgen de la Merced se centra en su papel como liberadora. Los fieles le imploran su ayuda en diversas situaciones, entre las que destacan:
- Liberación de la cárcel: para que interceda por aquellos que se encuentran privados de su libertad, buscando su pronta liberación y una justa resolución de sus casos.
- Protección en momentos de dificultad: En tiempos de crisis y sufrimiento, los devotos acuden a la Virgen de la Merced como un refugio seguro, pidiendo su amparo y consuelo.
- Justicia social: La Virgen de la Merced es considerada una abogada de los más débiles y oprimidos, por lo que se le pide que interceda por aquellos que sufren injusticias y desigualdades.
- Paz y armonía: Muchos fieles rezan a la Virgen de la Merced para que interceda por la paz en el mundo y en sus comunidades, buscando poner fin a los conflictos y promover la reconciliación.
¿Cuál es la oración de la Virgen de la Merced?
Existen numerosas oraciones dedicadas a la Virgen de la Merced, cada una con sus propias particularidades y expresiones de devoción. Una de las oraciones que puedes hacer a la virgen es la siguiente:
Dulcísima siempre Virgen María de la Merced, yo me ofrezco por hijo tuyo en honor y gloria de tu virginal pureza, te consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mis manos, mis pies, mi corazón y todo mi ser, para que me mires como hijo tuyo; que no piense, no haga, ni diga cosa alguna que desdiga de tal celestial virtud.
Guárdame, querida, Madre mía, oh, dulce abogada mía, sé tú mi salvación.
Madre Santísima de la Merced, hazme la gran merced, para que viva siempre en gracia de Dios. Madre dulcísima de la Merced, hazme la gran merced, para que te ame con un cariño filial.
Madre bondadosísima de la Merced, hazme la gran merced, de asistirme en la hora de mi muerte.
Amén.
¿A quiénes protege la Virgen de la Merced?
La Virgen de la Merced es considerada la patrona de una amplia variedad de grupos, entre los que se encuentran:
- Presos: Es la protectora por excelencia de aquellos que se encuentran encarcelados, brindándoles esperanza y consuelo.
- Oprimidos: Intercede por aquellos que sufren injusticias y desigualdades, buscando aliviar sus penas y restaurar su dignidad.
- Viajeros: Se la invoca como protectora durante los viajes, pidiendo su amparo en el camino.
- Enfermos: Los enfermos acuden a ella en busca de sanación física y espiritual.
Historias de Fe | La celebración de la Virgen María
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